FORTALECIMIENTO Y ACOMPAÑAMIENTO AL CONSEJO COMUNITARIO LAUREANO NARCISO MORENO DE CALAMAR, GUAVIARE A TRAVÉS DE PROCESOS DE RECONSTRUCCIÓN DE MEMORIA Y ACOMPAÑAMIENTO SOCIO- JURÍDICO PARA LA CONSTRUCCIÓN DE MECANISMOS DE GESTIÓN COMUNITARIA
“Ahora falta es que la vereda vuelva a recuperar esa alegría que nos quitó la violencia. Para eso necesitamos la tierra, para todos poder trabajar. Por líos y procesos jurídicos bien engorrosos, las tierras en donde estaba el asentamiento se las titularon a gente que ni siquiera vivía aquí. Con la organización del Consejo Comunitario queremos recuperar las fincas donde trabajábamos, que las titulen colectivamente y que los que se fueron desplazados por la violencia puedan volver. Con algunas personas que fueron desplazadas estamos pensando el retorno a la vereda, para que empecemos a hacer casa y labranza en las tierras despobladas que antes eran de nosotros. Sería bonito que la gente que aquí se amañaba pudiera comenzar de nuevo, ya no para sembrar coca, sino para vivir de otras cosas, y que volviéramos a tener esta vereda como la más importante y próspera de Calamar, con toda la alegría y las fiestas tan buenas que la caracterizaban. Ese es mi sueño, lo que le quiero dejar a mis hijos y a mis nietos” (Relato Marceliano Moreno, p.3).
Puerto Gaviotas es una de las 35 veredas del municipio de Calamar en el departamento del Guaviare. Su formación como asentamiento se dio desde los años 70 en las riberas del río Unilla en la zona sur de la Zona de Reserva Campesina más grande del país la cual abarca los municipios de San José del Guaviare, El Retorno y Calamar. Las memorias de Puerto Gaviotas retratan la historia de colonización y resistencia a la violencia de la comunidad negra y campesina que habita el noroccidente amazónico. El Consejo Comunitario Laureano Narciso Moreno de Calamar, se conformó en el año 2013 con el objetivo de reunir y organizar a las comunidades negras del municipio de Calamar, en especial de la vereda de Puerto Gaviotas. A través del Consejo se han canalizado demandas por: el reconocimiento como sujetos de Reparación Colectiva ante la Unidad de Atención y Reparación a las Víctimas, por los impactos individuales y colectivos causados en el marco del conflicto armado; el proceso de titulación colectiva de tierras ante la Agencia Nacional de Tierras, que permite la permanencia y desarrollo local de las comunidades; así como también, el reconocimiento como sujetos diferenciados culturalmente ante el Ministerio del Interior a través de la normalización jurídica del Consejo Comunitario.
En este contexto, desde la Corporación de Estudios sobre Memoria y Conflicto – CESYCME iniciamos un proceso de acompañamiento, fortalecimiento y reconstrucción de memoria con la comunidad de Puerto Gaviotas, la Junta de Acción Comunal y el Consejo Comunitario Laureano Narciso Moreno. El trabajo en Puerto Gaviotas ha ido tomando distintos rumbos y se ha fortalecido gracias al trabajo co-laborativo y la construcción de redes de confianza y afecto con la comunidad, los cuales se pueden agrupan en 4 fases:
- Recostrucción de memoria
- Trabajo desde las memorias audiovisuales (piezas museográficas)
- Acompañamiento socio-jurídico
- Construcción colectiva de informe para la Comisión de la Verdad
En su primera fase el proyecto tuvo como objetivos:
- Implementar estrategias integrales de acompañamiento y fortalecimiento de los procesos organizativos e identitarios del Consejo comunitario de Calamar Laureano Narciso Moreno.
- Acompañar de manera participativa, situada y co-elaborativa, el proceso de reconstrucción la memoria histórica de la comunidad de Puerto Gaviotas, tomando en consideración la memoria de la colonización, la memoria del desarraigo y la memoria de la resistencia afro en la vereda Puerto Gaviotas.
- Fortalecer el engranaje organizativo del Consejo de Calamar Laureano Narciso Moreno, a través del diseño y la implementación de los talleres de formación y de estrategias comunicativas comunitarias para la paz y el cambio social.
- Visibilizar a través de herramientas audiovisuales la identidad y cultura afro de Puerto Gaviotas, las afectaciones en el marco del conflicto armado y las estrategias de resistencia y afrontamiento del desarraigo.
Si bien la principal organización con la que se trabajó co-elaborativamente el proyecto fue el Consejo Comunitario, por la misma necesidad de realizar un proceso que tuviera un impacto local y veredal, fue necesario articular al proceso de fortalecimiento comunitario a la Junta de Acción Comunal (JAC) de la vereda de Puerto Gaviotas, pues la JAC es la máxima instancia de organización en la vereda y está conformada por distintos comités de trabajo, la Junta Directiva y los afiliados, que incluyen campesinos del interior del país y afrodescendientes provenientes del Pacífico colombiano. Por tal razón, trabajar con la JAC permitió por un lado, que en el desarrollo del proyecto participara la comunidad ampliada de la vereda, y por otro, que se potenciaran los objetivos por medio de la articulación entre los procesos comunitarios y los procesos organizativos, lo cual evitó que se crearan tensiones entre el Consejo Comunitario y la misma Junta, ya que no todos los habitantes de Puerto Gaviotas se reconocen como comunidad negra.
A su vez, en el proyecto también se reconocieron algunos roles que han sido fundamentales para la construcción de comunidad, entre ellos, el rol de los docentes y el papel de las mujeres. Los educadores de la región han jugado un papel central; casi todos provenientes de la región pacífico, crearon algunas redes familiares que a lo largo del tiempo fueron conformando los asentamientos afro de Puerto Gaviotas. Los profesores afro que conforman hoy el consejo comunitario son en su gran mayoría normalistas del Chocó que a mediados de los años noventa migraron a Calamar con la oportunidad de vincularse al magisterio. Los profesores afro el Consejo Comunitario tienen un importante liderazgo como intelectuales locales y gestores de la identidad afro, dado que promueven prácticas culturales que reivindican y mantienen viva la cultura festiva y gastronómica del pacífico colombiano. (Taller de memoria, realizado en la vereda, en septiembre de 2015)
Asimismo, las mujeres han sido claves en la construcción de comunidad desde el ámbito familiar hasta la configuración de procesos organizativos como lideresas en el Consejo Comunitario, la JAC y la Organización de Mujeres NIARA. Como se relata en una de las historias colectivas elaboradas en el proyecto, “nos interesa mostrar, desde los relatos de tres mujeres sobrevivientes al conflicto armado que hoy viven en la vereda de Puerto Gaviotas, lo que ellas vivieron en la bonaza cocalera y la época de la violencia. Partimos de la base según la cual, ellas tienen una perspectiva diferente a la de los hombres” (Relato de Ostaciana Morena Valencia, 2017)
Por su parte, este proyecto permitió considerar, construir y condensar lo co-elaborativo no sólo como una metodología de investigación sino como una manera de llevar a cabo las relaciones entre academia y organizaciones locales. En un sentido estricto, la metodología co-elaborativa busca dar cuenta de la fragosidad de relaciones que se construyen, tejen y sobreviven en el ejercicio del fortalecimiento organizativo. De aquí que la planeación severa y la ejecución de cada uno de los objetivos y actividades propuestas permitiera reflexionar sobre los declives, limitaciones y alcances del equipo, pues cada salida de campo implicaba nuevos aprendizajes y nuevos retos. Un ejemplo de esto son los mapas de parentesco, los cuales permitieron configurar la radiografía social y cultural de las familias en Puerto Gaviotas. Sin embargo, tras varias revisiones pudimos concluir la importancia de acudir a lugares como Buenaventura (Chocó), Palmira (Valle) y Bellavista (Cali-Valle del Cauca) para triangular la información.
Financiación: este proyecto fue aprobado y apoyado por las becas Francisco Javier, de la Oficina para el Fomento de la Responsabilidad Universitaria (OFRSU) Pontificia Universidad Javeriana en febrero del año 2015. Además se contó con la financiación de la Beca de Estímulos del Ministerio de Cultura, beca museográfica 2016 – 2017.
Equipo de trabajo: Camila Becerra Sandoval, Johanna Torres Pedraza, Diana Salamanca Mesa, Daniel Ortiz Gallego, Juliana Cubides Sánchez, Laura Valencia Ramírez, Luis Fernando Gómez, Jefferson Jaramillo Marín, María Alejandra Grillo, Andrés Pacheco Jaimes, Tomás Vergara, Óscar Ramírez, Juan Sebastián Torres.
Los resultados de este proceso fueron:
- Libro: El vuelo de las Gaviotas, Memorias de colonización y resistencias negras y campesinas en el Guaviare
El Centro de Estudios Culturales y Sociales de la Memoria, el Consejo Comunitario Laureano Narciso Moreno y la JAC de Puerto de Gaviotas construyeron y publicaron en conjunto 7 relatos que reconstruyen las memorias y resistencias de las comunidades negras y campesinas de Puerto Gaviotas. En el año 2015, el líder social que dio nombre al Consejo Comunitario, Don Laureano, quiso solicitar apoyo para la construcción de una reseña etno-histórica que sirviera como insumo para la reconstrucción de las memorias de colonización, resistencia negra y campesina de la zona, que a su vez, fuese útil para garantizar el cumplimiento de uno de los requisitos para la solicitud de titulación colectiva del territorio que les fue despojado a consecuencia de las vicisitudes del conflicto armado interno. El producto de este encuentro es el libro “El vuelo de las Gaviotas, Memorias de colonización y resistencias negras y campesinas en el Guaviare”, y la consolidación de una red de afectos, que derivó en ánimos recíprocos para darle continuidad al trabajo conjunto.
2. Documental: El Retorno de las Gaviotas
3. Piezas museográficas: Memorias Afro en Puerto Gaviotas, Guaviare. Entre el conflicto y las resistencias.
4. Capítulo en el libro Instituciones Comunitarias para la Paz en Colombia: Puerto Gaviotas, Guaviare: la experiencia de una comunidad sobreviviente y constructora de institucionalidad comunitaria
Este capítulo se divide en seis secciones. La primera, da un contexto geográfico y de los procesos de colonización afro y mestiza en la vereda de Puerto Gaviotas. La segunda, revela los orígenes de la ICPP en la vereda que están estrechamente ligados a la configuración de unos liderazgos por parte de los fundadores que establecieron procesos organizativos a partir de la distribución del espacio veredal de quienes llegaban a colonizar. La tercera sección, habla de los procesos organizativos que propiciaron ciertos liderazgos veredales para organizarse en Juntas patrióticas y Juntas de acción comunal, esta segunda instancia de la ICPP de Puerto Gaviotas, revela esfuerzos por parte de la comunidad para diseñar y establecer mecanismos de resolución pacífica de los conflictos. La cuarta sección, revela cómo en Puerto Gaviotas, la ICPP para mediados de los años noventa estuvo atravesada por la interlocución entre la JAC, los órdenes armados guerrilleros y la comunidad en crecimiento, este periodo se caracteriza por el fortalecimiento y la consolidación de unas procesos organizativos a través de unas nociones de Justicia y de autoridad compartidas entre la JAC y las FARC. La quinta sección, evidencia el momento de desarticulación y resquebrajamiento de los procesos de organización comunitaria que fueron entendidos por el Estado como proyectos estratégicos de las zonas de retaguardia de las FARC, esta instancia de la ICPP en Puerto Gaviotas muestra una inactividad de la JAC y de las formas comunitarias de asociación por las lógicas de arrasamiento del conflicto. Finalmente, la sexta sección, revela la reactivación de procesos de organización comunitaria como la JAC a través de la reconfiguración de la Asociación de Juntas de Calamar y de la fundación de nuevos escenarios organizativos como el Consejo comunitario y la Asociación de negritudes.